domingo, 2 de febrero de 2014

Tangible

Este es el último relato de una etapa de drama y tristeza. Quiero ponerle punto y aparte a esa temática porque ya me resulta repetitiva escribirla, y voy a abordar otras opciones sin renunciar a mi estilo. O al menos, eso intentaré. Un abrazo, gracias por leerme.
Pd. Tangible, definición: 2. Que se percibe de manera precisa.
Tangible
¿Nunca has sentido que el mundo se te viene encima? ¿Que las paredes estrechan la distancia que las separa y el techo intenta bajar hasta tocar el suelo mientras tú te acurrucas sintiéndote atrapado como un animal herido entre los muros de hormigón?
Pues así me siento yo. Y todo sin haberme levantado aún de la cama.
El frío se ha apoderado de mi cuerpo durante la madrugada. No sirven de nada las mantas, ni las sábanas, ni lo mucho que me acurruque. No hago más que tiritar.
Tampoco veo nada. No sé si el hecho de tener los párpados fuertemente apretados entre sí influye en ello, pero a decir verdad hoy prefiero no ver la luz del sol. Hoy no solo estoy mal, sino que además quiero estarlo. Quiero dejar de existir, perderme aquí entre las cuatro esquinas de mi colchón y que el mundo se olvide de mí. Porque hoy firmemente creo que no tengo motivos que me impulsen a despertarme.
Nadie me entiende, nadie me puede ayudar.
Tan solo la almohada se empatiza de mi estado y me permite que ahogue en ella mi llanto. ¿Quién me iba a decir a mí que acabaría cambiando los cálidos abrazos de las personas por la mirada inexistente e incomprensible de mi amiga de algodón?
Nadie.
Ojalá todo fuese un mal sueño, pienso. No es la primera vez que me tiro de los pelos, desesperado porque lo sea. Aún tengo la esperanza de que aparezca de la nada un monstruo que demuestre que esto que estoy viviendo no ha ocurrido ni ocurrirá. Por favor, suplico, quiero que esto sea una pesadilla y despertar de ella lo antes posible. Porque tengo miedo de afrontar lo que me espera fuera del refugio que me proporciona aislarme del mundo.
Hoy es el primer día del resto de mi vida, en el que estoy aquí, abriendo poco a poco los ojos siendo realista en una de esas mañanas en las que te das cuenta de que la realidad, por mucho que a veces nos empeñemos en maquillarla, da asco.
Alejandro Berraquero, a 20 de Enero de 2014 en hastaquesecolapselainspiracion.blogspot.com

2 comentarios:

  1. No dejes de soñar.hay luz en la oscuridad, abre los ojos. Ten fe, todo se solucionara

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